martes, 14 de febrero de 2012

Cocina para Principiantes 1: Formas de Cocción "ASADO"



Así como siete son los días de la semana también lo han sido las Maravillas del Mundo Antiguo y Moderno, y 7 son las maneras de cocción de los alimentos: hervida, al vapor, asada, friendo, horneando, a la plancha y guisando. Pues te puedes sorprender porque así como el hombre evoluciona la cocina lo hace con el, y ahora también puedes cocinar "al Papillote"...¿Que no sabes como es? precisamente conociendo que hay muchas personas que por multiples razones quisieran aprender a cocinar pero no se atreven a dar ese paso, vamos a enseñarles algunas técnicas y recetas sencillas pero magistrales para que se luzcan en una comida con invitados o para sorprender a alguien especial en una fecha importante.

Lo primero es conocer que hay varias maneras de cocción de la comida, cada una de ellas cambia sustancialmente el sabor y la textura de los alimentos, incluso su valor energético y alimenticio, de allí que aquel retórico de que para adelgazar no comas fritos es totalmente cierto, pero es también lo delicioso y apetecible de la comida cuando la freímos, el crocante por fuera, el sabor, lo jugoso por dentro, en fin que como decidas cocinar tus alimentos no tiene que centrarse en tres o cuatro formas, deliciosas todas ellas.

Comencemos por el principio:
Las Brasas o Asado:
Quizás sea una de las formas más antiguas de cocinar, a veces imagino a aquellos hombres de las cavernas la primera vez que por casualidad o por iniciativa de alguno, colocaron algún pedazo de carne, tal vez de un Mamut, sobre unas brasas ardientes y vieron como cambiaba radicalmente el color de la misma, es más imagínense a esos humanos primates como el "Hombre de Cro-magnon" olfateando esa carne a las brasas cocinándose en su grasa, desprendiendo ese particular, identificable y delicioso aroma de carne asada que llegaba a ese cerebro primitivo para nunca más abandonarlo. Y cuando la probaron: el cambio de textura, esa sensación de "comida caliente", como sus dientes y mandíbulas casi sin esfuerzo disfrutaban de ese primer manjar "preparado por el humano".

Ya no sería el simple hecho de alimentarse lo que seguramente les atraería de la carne, sino también el poder disfrutar de este humilde festín. No se si esto incentivaría el consumo de aquellos animales por parte del hombre e incluso si esto ayudaría con la extinción de especies. Pero de lo que si estoy seguro y científicamente probado (Lo crudo y lo cocido, de Claude Lévi-Strauss) es que esta alimentación omnivora ayudaría al crecimiento de nuestro cerebro y del desarrollo de aquella primitiva masa encefálica. Cambiaría radicalmente nuestras costumbres nómadas por la crianza de ganado y aves que aplacarán tanto la necesidad de alimentarnos como el placer de comer.

El Asado, que puede hacerse en el horno como a fuego directo, es un sistema de cocción que hace que el alimento se dore a medida que se cocina. La base para empezar es grasa o aceite, pero también pueden añadirse adobos preparados con vino, cerveza, malta, brandy, agua, jugos de cítricos, vinagre y vegetales. Es un sistema de cocción maravilloso que proporciona un sabor muy característico y que realza los alimentos al nivel de MANJARES.

Lo mejor es aprovechar los líquidos producidos por la cocción, las grasas y el adobo que utilicemos, con lo que aumentamos su valor energético y sensitivo, que acompañado por esa textura firme que toman los alimentos (mas consistente que los guisados) les hacen apetecibles a cualquier paladar. Un detalle especial de esta forma de cocinar es que los alimentos adquieren un sabor que varia según sean cocidos al fuego de gas o de leña.

Ciertamente los alimentos ricos en grasas varían en cuanto a su energía, ya que la pierden al cocinarlos, pero si aprovechamos estos jugos generados durante el proceso y preparamos una salsa con ella, o les acompañamos con salsas variadas o simplemente un chorrito de un buen aceite consiguiendo compensar esa perdida energética conseguiremos un plato muy completo; lo cierto es que es una forma de cocinar que realza el sabor y presentación de los alimentos. Cantas veces no nos hemos dejado cautivar por una deliciosa pizza a la leña, un pollo a las brasas (mejor si es cocinado con el mojito de vinagre y ajo típico en Venezuela) o un Pernil de Cerdo (Pata) que suele acompañar las festividades navideñas.

Nuestra receta de hoy es uno de los platos típicos más entrañables en las fiestas decembrinas venezolanas, como siempre, le he dado mi toque gourmet que hace de este plato una comida de reyes:

Pernil de Cerdo con Salsa de Ciruelas

Un Pernil o Paleta del tamaño necesario para la cantidad de comensales que vayas a tener, suele calcularse a razón de 300 a 350 grm por invitado.
Cebollitas y Pepinillos encurtidos en vinagre
Aceitunas sin hueso
Alcaparras
Dientes grandes de Ajo
Ciruelas sin Hueso
2 botellines de Malta
Cebolla
Celery
Ajoporro
Pimentones
Ají Dulce
Laurel
Orégano, Tomillo y Estragón
Canela molida
Pimienta Negra
Sal fina y gruesa
Azúcar morena
Maicena
Aceite
y mucho tiempo...

Por lo menos 24 horas antes debes poner a macerar la carne en un adobo preparado con la cebolla, el celery, el ajoporro, los pimentones y el ají dulce con un poco de agua y aceite, colócalo todo un una licuadora con un poco de sal; después de triturarlo bien utiliza este liquido para cubrir lo más que puedas la pieza del pernil. 

Importante es que el pernil no tenga la piel ni exceso de grasa.

Posteriormente mecharemos con los encurtidos la carne. El proceso de mechar la carne consiste en abrir profundos orificios en la pieza para introducir en ellos: los dientes de ajo, las cebollitas en vinagre, trozos de pepinillo, aceitunas, alcaparras, algunas ciruelas y algunas piedras de sal gruesa.

Sal pimienta toda la pieza, y colocala en una bandeja con profundidad. Ahora báñala con el adobo donde se maceró desde el día anterior y las maltas. Coloca unas hojas de Laurel y abundantes ciruelas en el liquido. Y espolvorea con canela, tomillo, estragón y mucho orégano por encima al pernil. Cubre con papel de aluminio y llévalo al horno a 200ºC, necesitarás más o menos 1 hora de cocción por cada kilogramo de peso que tenga la pieza.

Cuando estés entrando en la ultima hora de cocción, quita el papel de aluminio. Verás que ahora hay una mezcla maravillosa de líquidos como el adobo, las maltas y los jugos y grasas propias del cerdo. Baña constantemente la pieza mientras está comienza a dorarse. Cuando ya tengo bastante color deja caer sal gorda sobre la carne y no bañes más con la salsa.

Una vez tenga el punto de color que te guste haz un corte hasta el hueso para asegurarte que la cocción ha sido la deseada. Retira todos los jugos de la bandeja y resérvalo, deja el pernil dentro del horno ya apagado.

Del liquido retira las hojas del Laurel, pero deja todo lo demás dentro, incluyendo las ciruelas, licua todo muy bien, que no queden grumos o tropezones. Vierte esta salsa en un sartén grande o una caldero y agrégale un par de cucharadas de azúcar moreno y si quieres algunas ciruelas para adornar, llévalo a hervor y que reduzca hasta que esta salsa tome un color oscuro. Espésala con un poco de maicena. Realmente es un plato que vale la pena compartir con tus amigos y familias.

Pero si no te atreves a prepararlo, por falta de tiempo o por el motivo que sea, contacta con nosotros y te los preparamos y llevamos a casa, quédate tu con las caras de felicidad de tus comensales y los halagos de todos al disfrutar un día del más delicioso pernil al estilo venezolano.

Próxima entrega de Cocina para Principiantes: FREIR

  









lunes, 6 de febrero de 2012

El Santo más Sabroso: El SANCOCHO


Lo que antes era simplemente INVIERNO ahora los meteorólogos le llaman OLA DE FRIO SIBERIANO, y de verdad que te sientes en SIBERIA, porque después que bajas de 0º de temperatura, ya da igual sean -1º o -36º es un frío ESPANTOSO. Pero claro, el hombre ha tenido que dominar los elementos para poder conquistar la tierra y uno de las armas que ha usado para este fin ha sido la comida.

¿Cómo poder pasar un frío tan severo como cada año debe soportar en esta parte del planeta?, o más aún ¿cómo poder vivir en SIBERIA o en FINLANDIA con temperaturas tan bajas?: gracias a que puede nutrirse con alimentos muy cargados de grasas y calorias que su cuerpo transforma en calor y fuerza.

Estas comidas que no solo calientan el cuerpo desde adentro sino que hacen más agradable y llevadero el periodo de frío por estos lares, suelen ser unas bombas protéicas y de sabores increibles, platos cargados de colores e intensos sabores capaces de "levantar muertos" y "derrumbar castillos". Combinaciones magistrales de verduras, carnes, embutidos y granos (judias) que han deleitado a príncipes y plebeyos por igual.

Pucheros, sopas, cocidos, cremas y atoles de cereales han acompañado las tres comidas del día, siempre con el objetivo de ayudar a pasar los inviernos. En Europa se solía desayunar con una especie de sopa de cereales (la cebada o el trigo por ejemplo) que ayudaba a mojar el pan duro y que solían llevar a la faena diaria los campesinos y cazadores. Los cereales de esta sopa y los residuos de pan que quedaban en ella solían fermentarse y darle un toque de picor (y alcohol) que contrario a dañar el plato lo mejoraba, Asi pues comenzó la idea de prepararla y dejarla guardada unos días antes de comerla...nacía de esta forma LA CERVEZA. En los Andes venezolanos, nuestra tierra fría por las alturas en que se encuentran, es muy típico desayunar con una pisca.

Todavía hoy día, dejar platos de cucharas de un día para otro definitivamente potencia sus sabores y consistencias. Mucho de esto tiene que ver con la GRASA y el contenido graso que tenga un plato:
"La modificación del sabor es posible sólo con la modificación del contenido graso del alimento, en algunos estudios científicos se ha demostrado que la cantidad de contenido graso en la leche afecta al sabor de la vainilla. A veces se dice que la carne está más 'sabrosa' si ésta posee cierta cantidad de grasa, o que el jamón es más rico si posee sus vetas de grasa. Esta afirmación popular confirma que la grasa de los alimentos potencia el sabor de los mismos."                                                                                                                                                           www.es.wikipedia.org
Por eso es que estos platos preparados como LA FABADA ASTURIANA, EL PUCHERO GALLEGO, etc., estén tan cargados de embutidos de cerdo, morcillas, chorizos o partes muy grasas como el tocino, el codillo o la panceta, caldos de huesos de jamón, gallina, vacunos, etc. En los casos de las sopas "made in" el trópico y más concretamente del caribe, las sopas suelen ser muy cargadas de sabor pero esta vez por la combinación de elementos animales y vegetales.

Tenemos tanta variedad de tubérculos y hortalizas que al conjuntarse con la influencia muy marcada por la dieta mediterránea y una innegable fusión de la dieta indígena y africana ha dado como resultado una de las sopas mas potentes y deliciosas que conozco...nuestro SANCOCHO.

Con el frío que estamos pasando por estas latitudes he estado pensando (y recordando) los sin número de veces que disfruté, cocinando y comiendo, esta deliciosa sopa y que gracias a la globalización hoy en día es relativamente fácil poder seguir disfrutándola tan lejos de aquellas tierras de gracia. En los mercados populares o en las tiendas latinas podemos encontrar ÑAME, BATATA, OCUMO, APIO O MALANGA,  CILANTRO, TOPOCHO,YUCA, AUYAMA (CALABAZA), JOJOTOS y por su puesto PAPAS.

Es muy típico en mi país que se prepare está sopa después de una fiesta, incluso los restaurantes 24horas suelen tenerla preparada para los fines de semana, porque no hay nada mejor que después de una buena noche de juerga, recompongas energía y evites una resaca descomunal disfrutando de un delicioso sancocho, simple o "cruzao". Simple cuando se utiliza un solo tipo de carne en su preparación o "CRUZAO" cuando se utilizan dos tipos de carnes (Trifasico cuando son tres las carnes). Lo usual en el centro del país es que se haga con carne de res y ave, un buen pedazo de carne de vacuno y una buena gallina es la mejor combinación. Sin menospreciar los cruzaos orientales con pescado, o los larense-falconianos con chivo.

Esta sopa donde "nada" predomina y "todo" es protagonista, combina un caldo fuerte y sustancial con las proteínas de su parte animal y carbohidratos, almidones y fibras de su lado vegetal. Haciendo que sea un plato único en la mesa venezolana solo acompañado de unas recién hechas arepas con mantequilla y nata criolla o un cazabe bien tostado.

Quizás uno de los SANCOCHOS más increíble es el de panza de cerdo con garbanzos o MONDONGO. Nada se compara a un almuerzo del domingo con un rico MONDONGO, sus pedazos de jojotos (trozos de mazorca de maíz) y topocho (tipico plátano de fuerte contextura que se come cocido). Se me hace "agua la boca" solo de recordarlo.

El sancocho mas extraordinario que he preparado y comido fue en compañía de mi compadre y amigo Simón, habíamos tenido en casa una de esas fiestas en que bailar y divertirse son sinónimos de "felicidad", estábamos en pleno paro petrolero y general que intentaba obligar unas elecciones para un cambio de régimen que al final se quedó con el poder en mi país. Era el cumpleaños numero quince de mi hermosa primogénita, en Venezuela se suele celebrar los quinceaños de nuestras hijas por todo lo alto (dentro de las posibilidades económicas y fueras de ellas también). Lo cierto que bajo una situación bastante inusual y extrema, no podríamos hacer esa presentación a sociedad de mi hija como queríamos.

Los limites están solo en la mente, llamamos a los amigos que podían trasladarse sin coches a nuestra casa y tuvimos una gran fiesta bailable, donde asistieron hasta vecinos. Toda la noche bailando, tomando y riendo;  apenas vislumbramos los primeros rayos del nuevo día, mi compadre Simón tuvo la idea de cerrar con broche de oro la juerga, preparar un buen cruzao de carne y pollo. De donde o como hizo aparecer todos los ingredientes: poco lo recuerdo, lo que si es seguro es que a golpe de las 7 de la mañana estaban las 4 ollas mas grandes de mi casa a fuego alto preparando un super sancocho al que no le faltaba nada, desbordaba de verduras, de carne, de sofrito, de caldo, el olor podría haber atraído a toda la comunidad.

Dos horas después y por lo menos dos platos disfrutados por cada uno de los comensales, fuimos cayendo uno a uno en los brazos de Morfeo, con la barriga llena, el cuerpo alimentado, el espíritu feliz y una sonrisa placentera en nuestros rostros. Bendito Sancocho lleno de sabor tu eres...

Mi receta para que te animes en preparar esta maravillosa sopa es la siguiente (recuerda que las cantidades para mi son relativas y tu debes ir descubriendo tu toque personal en cada receta):

Carne de Res picada en trozos (Falda sí estas en Venezuela y Vacío sí estas en España)
Pollo o Gallina Troceados

Para el Sofrito:
Cebolla
Celery (apio)
Pimentón (pimiento verde y rojo)
Ajoporro (puerro)
Ajo

Verduras:
Papas (patatas)
Zanahorias
Yuca
Auyama (calabaza)
Ñame
Ocumo
Malanga o Apio
Batata
Topocho (no se consigue en España)
Jojoto en trozos (mazorca de maíz tierno)

Especies:
Cubitos de Pollo
Sal y Pimienta Negra
Picante al gusto
Cilantro

Necesitas la olla más grande que tengas, mete allí las carnes, llena de agua y llevarlo a hervor, una vez reviente a hervir baja el fuego a la mitad, hecha unos tres cubitos concentrados de pollo y deja cocer una hora o hasta que la carne este blanda. Pendiente de que siempre tenga una buena cantidad de agua.

Prepara un sofrito picando muy pequeños los ingredientes y con un chorrito de aceite de maíz, solo hasta cristalizar la cebolla y el ajoporro. Las cantidades dependerán de la cantidad de sopa que estés realizando pero debe equivaler a unos 100gr x litro de agua, todos en proporciones iguales menos el ajo que con un par de dientes suele ser suficiente. Agrégalos al caldo

Mientras, pela todas las verduras y córtalas robustamente, yo prefiero en trozos medianos de unos 5cm, separa las más suaves de las que necesitaran mas calor como la yuca, la zanahoria, el jojoto y el topocho; introduce estas en el caldo cuando le falte unos 15 minutos para completar la hora, el resto (la papa, el ñame, la malanga, el ocumo, la batata y la auyama) al completar la hora de cocción de la carne.Tapa la olla y deja cocinar unos 30 o 40 minutos más. Salpimienta, agrega cilantro finamente picado.

Para mi es siempre necesario para que una buena sopa conjugue a la perfección sus sabores darle un pequeño toque de algún buen picante, no debe sentirse el picante en la sopa, debe dejar como un buque que motivará las papilas gustativas una vez se ha tragado el sorbo de caldo, esa debe ser la intención del picante en  este plato. Por lo que te sugiero que le des en este momento ese toquecito especial de un buen picante casero o un maravilloso picante KATARA del Amazonas.


Nuestra sopa está casi a punto, revisemos el punto de sal, pimienta y picante y listo para servir. Yo siempre recomiendo que la dejes reposar unos minutos y que antes de servir espolvorees cilantro finamente picado, al presentar da mucho color un poco de cilantro fresco flotando en el caldo. Garantiza que en cada plato que sirves halla un poco de todo y unas buenas porciones de ambas carnes. Ya con esto ni el frío, ni el calor, ni el hambre ni la tristeza podrá hacernos sufrir, porque nos encomendamos a este santo tan sabroso...a nuestro SANCOCHO



miércoles, 1 de febrero de 2012

Pisto, Guiso, Verduras...Ratatouille!!!























Soy un apasionado de las películas de Disney, desde siempre y hasta nunca lo seré. Aunque mi película favorita de este genero es "El Rey León" debo confesar que desde hace poco soy un fanático incondicional de "RATATOUILLE".

En un principio me opuse a ver una peli que presentaba a dos elementos que a mi entender no eran compatibles el uno con el otro. Que es eso de: UNA RATA EN LA COCINA, por Dios que asco tan asqueroso, el solo hecho de imaginarme ese aprensivo, desagradable e insalubre animal en el TEMPLO DE LA COMIDA de cada casa, ya ni hablar de un restaurante (y menos uno como el "Gusteau`S" con tenedores Michelin) y peor: ¡COCINANDO!, como diría mi abuela "¡Fin de Mundo...Sodoma y Gomorra!".

En fin que tuvieron que pasar más de 5 años para que por casualidad (o causalidad) llegase a tener en mi ordenador este film. Y desde la primera vez que la vi quedé pegado de ella, enamorado perdido de una verdadera obra de arte, como la primera vez que probé un profiterol de chocolate o una Cachapa con queso telita, mi corazón y mi mejor sentido (el gusto) quedaron fascinados con el mensaje, la forma de expresar el amor por los sabores, el poder casi mágico que tiene el combinar las especies, las texturas, resaltar su buqué en lengua y el olfato, como pasearse por los seis tipos de sabores existentes (ácido, agrio, astringente, amargo, dulce y salado) y dejar que cada uno intervenga en un bocado para hacernos sentir dioses celebrando la victoria o niños merendando con su madre. La comida debe ser EVOCADORA, que te haga activar los recuerdos, los momentos, las experiencias agradables y recibir una descarga de endorfinas que nos hagan ser felices en ese momento...¡Ser un Placer!

Hoy escribo sobre esto, porque hace unos días atrás, tratando de distraer a mi hija de 11 meses, se me ocurrió ponerle una película para niños, y comenzamos a ver nuevamente la aventura de la rata que quería ser Chef Gourmet de Cocina. La historia completa se basa en cuatro puntos cardinales:

  1. Cualquier persona puede cocinar, no importa condiciones sociales, geográficas, culturales ni genéticas, la capacidad de cocinar es tan placentero como el de comer.
  2. La intima relación que guardan en la comida el gusto y el olfato (El 80% de lo que se detecta como sabor es procedente de la sensación de olor). 
  3. La expresión que define cada ingrediente dentro de una opera prima que llamamos Comida. La maravillosa experiencia que es cocinarle a tus comensales, ver la felicidad que inspira la acción de alimentar tanto al espíritu como al cuerpo.
  4. Y por ultimo lo Evocadora que debe ser la comida, lo que me ha inspirado este tema hoy.

Por ello insisto en que las personas dejen de cocinar solo para alimentarse, y con esto no quiero decir que una deliciosa pizza o un perro caliente no entren en esta lista, por el contrario, cada plato que nos preparemos, que sirvamos, que compartamos, tenga la carga emocional como para que cree en nuestra memoria un momento especial y el día que volvamos a probarlo recordemos todo aquello que nos llenó de alegrías; ese sentimiento de tranquilidad y satisfacción que nos eleva a un nivel superior de ser simples mortales y que viene y va, fomentando a ese niño que todos llevamos por dentro.

Claro que no podría terminar este escrito de hoy sin darles mi receta de mi Ratatuoille. Este no es más que un guiso de verduras con hierbas aromatizantes y aceite de oliva:

"Es una especialidad regional francesa elaborada con diferentes hortalizas y originaria de la ciudad de Niza y más en general de la región de Provenza (sureste de Francia). Su nombre completo es ratatouille niçoise (nizarda), y proviene etimológimamente de dos verbos francés tatouiller y ratouiller, que tienen su origen en el verbo touiller que significa "REMOVER", que es la operación que se realiza al elaborar este plato.
- Se trata de un plato vegetariano resultante de guisar en aceite de oliva unas hortalizas que se pueden cocinar todas juntas o por separado (los puristas del plato dicen que deben prepararse por separado y luego cocinarlas todas juntas en su fase final). Existen recetas en las que se determinan secuencias concretas de preparación de las hortalizas. Por regla general se incluye siempre tomates, ajo, pimientos ,cebollas, calabacín y berenjenas en proporciones variables. Además, se puede añadir el bulbo del hinojo cortado, lo que aromatiza más al plato. Como aromatizador se suelen emplear además diversas mezclas de hierbas como tomillo, romero, albahaca, orégano, entre otros, las llamadas hierbas provenzales. Como muchos platos de verduras en salsa, suelen adquirir mejor sabor si se dejan reposar algún tiempo o si se recalientan. El plato puede quedar en el refrigerador durante varios días.
- Es un plato frecuente en los meses calurosos del verano en Francia. Se sirve solo, acompañado de pan tostado, arroz, cuscús o patatas o muy frecuentemente como guarnición de algún plato de carne o pescado. Se puede servir frío o caliente, al gusto del comensal. A veces se emplea la ratatouille como relleno o acompañamiento de la tortilla francesa." 
http://www.cocinandoconcatman.com 
Lo cierto es que en todas partes del planeta tenemos nuestro propio Ratatouille. En España se le llama Pisto, Capotana en Italia, Kaputana en Malta, Lecsó en Hungría, Imán Bayaldi en Turquía y mi madre le llamaba "Guiso de Verduras" sin más. Yo les doy mi receta particular, que como plato único o como guarnición es delicioso. Pero recomiendo que experimentes con el, yo lo he servido como relleno de un pastel, como salsa para una pasta corta, en una pizza y hasta en un bocadillo (bocata):


  • Las hortalizas básicas para su preparación son: la berenjena, el calabacín, el pimiento (pimentón rojo, verde y amarillo), tomate, cebolla, ajo. Pero en ocasiones y por presentación he agregado zanahoria (que le da un toque dulce), calabaza (auyama) y aceitunas negras (sin huesos).
  • Aceite de Oliva
  • Necesitarás disponer de algunas hierbas Provenzales como el Romero, Tomillo, Albahaca, Laurel y y Orégano. A mi en particular me gusta darle un toque de picante con Pimentón Picante, Pimienta de Cayena o Paprika.
  • Una taza de caldo de aves (o un cubito de pollo)
  • Sal al Gusto
  • Maizena


Hay dos presentaciones o formas de hacerlo que son las que uso, una para cuando el guiso será una guarnición o porque vas a tenerlo envasado en el refrigerador para cuando te apetece y la otra cuando quieres presentarlo como plato principal:


  • La primera es haciendo honor a su nombre ("remover") y es picar todo en dados medianos (un par de centímetros o menos) y organizar separadamente cada verdura., Si vas a usar hortalizas duras como la zanahoria, debes cocinar estas de primero,ya que el resto tiene mas contenido de agua y se cocinaran mas rápido. 
  • Lamina los ajos finamente.
  • Preferiblemente en un caldero, agrega el aceite de oliva con un chorro bondadoso y sofríe ligeramente el ajo y la cebolla. Coloca un par de hojas de laurel y agrega la zanahoria, luego los pimientos y por ultimo el calabacín y la berenjena, remueve para que todos los ingredientes vayan friéndose lo mejor posible. 
  • Mientras, prepara un poco de tomate triturado junto con el caldo de pollo en una licuadora y agrégalo al caldero, si lo prefieres usa tomate frito, tomatina o concentrado de tomate en pasta.
  • Remueve constantemente, mientras que sazonas con las hiervas Provenzales y sal pimientas a tu gusto.
  • Bájale el fuego y prepara en una taza pequeña una cucharadita de maizena en agua templada, para que vayas agregando lo necesario a la cocción hasta dar un ligero espesor al liquido. 
  • Deja cocinar por unos minutos más, mejora el punto de sal y ¡Listo! tu Ratatouille está en su punto para comer.


Si lo que quieres es usar este guiso como plato principal, esta es mi segunda receta:

  • Pica todos los ingredientes en rodajas finas con una mandolina. 
  • En una bandeja de horno disponemos de las rodajas secuencialmente haciendo una espiral intercalando una rodaja de berenjena, una de cebolla, una de pimiento, una de tomate y una de calabacín. En esta receta puedes utilizar la zanahoria y la calabaza también buscando un colorido increíble en el plato a presentar.
  • Báñalos con un chorro fino de aceite de oliva, sal pimienta y espolvoréalos con las hierbas Provenzales.
  • Tápalos con papel de aluminio y mételos al horno a 180º unos minutos
  • Tritura otros tomates y en un sartén con un poco de aceite sofríe el ajo y un poco de cebolla, el laurel y un poco de las especies, lleva al hervor por unos minutos y reserva.
  • Descubre la bandeja y baña con la salsa preparada y deja terminar de hacerse por unos minutos, recuerda que estas hortalizas suelen hacerse muy rápido y queremos que tengan esa sensación "al dente" en la boca.



servedPara servir este plato te recomiendo que sobre un nido de arroz, cuscús, o pure de patatas coloques el ratatouille y decores con un huevo escalfado encima y una ramita de perejil para rematar. Será fantástico cuando la yema caliente bañe el guiso y se mezcle con la guarnición.

Un plato ligero, delicioso y espectacular en su presentación que arrancará muchos elogios de tus comensales sin haberlo probado y fanatismo por tu comida después de degustarlo. Espero te atrevas  hacerlo y nos lo cuentes por aquí.













miércoles, 25 de enero de 2012

Una Exquisita Salsa a base de Vino

Siguiendo en la linea de los vinos, éste néctar fermentado de uvas puede fácilmente ser usado en la cocina, razón por la que quiero compartir una receta de mi propia creación y para mi muy especial. Es una de las recetas preferidas de mi padre y que me la ha pedido mil veces y mil veces la ha perdido, así que esta vez dejo constancia de ella en la red para que pueda buscarla cada vez que le apetezca.

Es una salsa con base de vino tinto perfecta para acompañar carnes rojas, en especial el cerdo aunque con el pavo va muy bien también. Un buen solomillo de cerdo sazonado con pimienta negra, sal gruesa y eneldo, vuelta y vuelta en una plancha bien caliente es un plato delicioso. Pero si éste Solomillo es acompañado con una Salsa de Grosellas, Frutos del Bosque, Granadina y Vino Tinto, ya se convierte en una comida que eleva al nivel de "Manjar de Dioses" a dicho plato. 

Lo que les sugiero preparar con esta receta es:

"Solomillo de Cerdo con Salsa de Grosellas, Frutos de Bosque, Granadina y Vino Tinto con una guarnición de Puré Grueso de Patatas y Pimientos Asados"

Como siempre comento, el objetivo de este blog es permitirles a ustedes cocinar gourmet todos los días con los productos que pueden encontrar en casa o en el supermercado. Muchas veces no disponemos de caldos para las bases de las salsas, por lo que el uso de Cubitos Concentrados son perfectos para este menester, incluso el uso de frutas de temporadas o exóticas puede remplazarse por ofertas de los mismo (jugos ya preparados, pulpa congelada, concentrados) que hoy encontramos en nuestro centro de abastecimiento cercano. 

Para esta receta necesitaras un buen magro de cerdo si no encuentras el solomillo (o la economía no nos lo permite). Está escrita paso a paso como recomiendo hacerla:

Corta el solomillo en medallones de unos 3 o 4 cm, sazónalos con sal, pimienta negra y eneldo molido.

Prepara un puré de patatas (dejándolo muy grueso, con tropezones de papas), con mantequilla, un poco de leche, un toque de queso cheedar rayado y sal. Para hacer un puré rapidamente, pela y corta en cuadritos las patas antes de hervirlas. Reservalo en caliente.

Preparamos la salsa, para la que necesitaras:
  • 100cc de Zumo de Grosellas, bien colado sin residuos
  • 100cc de Zumo de Granadina igual
  • 100cc de Zumo de Frutos del Bosque, idem
  • 1/2 taza de Vino Tinto con mucho cuerpo (Rioja, Cabernet o el que tengas a mano)
  • 2 o 3 cucharadas de Azúcar Moreno (al gusto)
  • 1 o 2 Cubitos de Caldo Concentrado de Jamón o Costilla Criolla
  • 1/2 Lamina de Gelatina sin Sabor
  • Sal Gruesa
  • Maizena para espesar

En un pequeño sartén a fuego medio, agrega los zumos y el azúcar, deja reducir y agrega el vino y los cubitos.Mientras tanto en un platico llano con agua,  hidrata la gelatina y en una taza pequeña con un poco de agua diluye una cucharadita de maizena que necesitarás al final.

Revisa la salsa, mejora el punto de sal y de azúcar a tu gusto, agrega la gelatina y diluyela rápidamente. Esta le dará una brillantez y elasticidad muy apetitosa. Llévala al punto de espesor deseado agregándole poco a poco la maizena y revolviendo vigorosamente la salsa, ¡Lista para servir!, así que resérvala en caliente.

En una sartén bien caliente hecha un buen chorro de aceite de oliva y coloca dos pimientos verdes por comensal a asar, importante que se doren por todos las lados y sazonalos con sal gruesa. Tenlos al fuego hasta que pierdan un poco de rigidez sus carnes.Yo suelo quitarles las semillas y abrirlos de punta a punta.

Mientras tanto en otro sartén muy caliente rocialo con aceite y coloca los medallones, sazónalo con un poco de sal gruesa. Solo debes dorarlos por ambos lados un par de minutos, queremos que la carne esté jugosa por dentro.

Emplata un par de medallones, una porción de puré y dos pimientos. Ensalza la carne poniendo una buena cantidad alrededor de la misma y déjale caer un chorrito encima, de esta manera permites que cada comensal disfrute de la salsa y de la carne a su gusto, espolvorea el plato con perejil picado.

Prepárate para degustar un plato gourmet que despierta muchos adeptos, tus comensales pensaran que dedicaste mucho tiempo en la cocina, pero en realidad solo necesitarás unos 30 minutos para hacerlo (desde 0). Es precisamente en la sencillez y delicadeza de esta preparación que radica su exquisitez y permite disfrutar del sabor de todos sus componentes, sin dejar de sorprender la carga de cualidades gastronómicos que intervienen en cada bocado. 

Una salsa con matices agridulces y con sabor intenso, de un color burdeos brillante y provocativo, que en el paladar explota una serie de trazos dulces, salados, ácidos y frutales que es poesía para las papilas gustativas, una experiencia única que maximiza una carne ya deliciosa por si sola y que acaba siendo la música de una buena película.




Vino nuestro de Cada Día





Me sorprendió recientemente leer que la palabra "BRINDIS" que al escucharla nos lleva inmediatamente a momentos placenteros en su mayoría, viene de la expresión alemana: "ICH BRING DIR'S", que significa YO TE LO TRAIGO. Esta palabra llegaría al español por medio de los italianos: cuentan que los lansquenetes (en alemán Landsknecht, servidor del país (de «Land», tierra o país y «Knecht», servidor), nombre con que se designó a algunos mercenarios alemanes que operaron entre el siglo XV y el XVII) de Carlos V saquearon la ciudad de Roma y celebraban la victoria alzando copas con vino y gritando esta expresión.

Cuantas veces no hemos BRINDADO ( o YATELOHETRAIDO) con ese agua de dioses fruto si se quiere del Dios BACO que desde la antigua Grecia nos dejó este formidable néctar, pero no es así. La historia del vino parece haber nacido casi con el hombre. Se conoce, que desde los antiguos egipcios ya se hablaba y se escribía sobre un brebaje medicinal sacado de las uvas. Quizás la primera vez que el homo erectus probó esta bebida habría sido con una racimo de uvas fermentadas que lo pusieron sabrosón, con vidilla, alegre que se dice y desde entonces le agarro el gusto de beber fermentado el zumo de aquella fruta.

Lo cierto es que desconocemos el origen (como si eso importara) de una de las bebidas más universales del mundo, compartida por ricos y pobres, realezas y plebeyos el vino ha sido y seguirá siendo (como dijo Benjamín Franklin) la bebida que hace "la vida más fácil y llevadera, con menos tensiones y más tolerancia", ¡claro esto por un par de horas nada más!.

A mi me llegó pronto el disfrute de este placer. Aún adolescente pero ya entrando en la etapa de la adultes (que no es adulterio por si se confunden) conocí al famoso vino pasitas, sacado de la fermentación nada más y nada menos que de la Banana fermentada (cambur para los paisanos). Con un dulzor engañoso y un poder alcohólico quiebra-vergüenzas, recuerdo las veces que la alegría se apoderó de mis pensamientos y acciones y quien sabe cuantas tonterías abre hecho (gracias a Dios en aquella época no habían móviles con cámaras).

Lo cierto es que poco a poco fue más interesante el acercamiento al vino y su alegria etérea. Empezaron a llegar a mí vista los tintos, los blancos, los rosados, luego a mí gusto los dulces, semi-dulces, secos, abocados, semi-secos, jóvenes, para finalmente llegar a mi paladar por sus nombres; el Cabernet, el Sauvignon, el Merlot, el Malbec, el Chardonnay, el Tempranillo, el Rioja, los maravillosos Pinot: Grigio, Noir o Meunier. Muchos procedentes del Sur del continente desde Chile o Argentina, otros del norte, desde California o muy lejanos desde Australia. Cabernet franc, Carignane, Grenache, Mouvedre, Petit Sirah, Petit Verdot, Sangiovese. Y pare usted de contar, hasta pasando por la "Leche de la Mujer Amada" por cierto germánico como el "Brindis".

El vino es una bebida que nos puede acompañar en cualquier momento, tanto en las alegrías como en las adversidades. Por eso para ser un buen gourmet no debes cerrarte a la idea de compartir más veces un buen vino (o una cerveza, ¡claro está!) a diario. Hasta lo recomiendan los médicos, sin excesos, como debe ser. Pero no te limites a solo "ocasiones especiales", cada día hay muchas razones por la que servirte un par de copitas (una para ti y la otra para quien tu quieras) y veras como las relaciones entre tu pareja, tu familia y tus amigos tienen su momento especial para hacer una buena y serena conversación.


Cuando decidas tener una cena especial y quieres lucirte acompañando la velada y la comida con vinos te recomiendo que:
- Los vinos blancos los sirvas antes de los tintos.
- Se debe servir primero los vinos más jóvenes y deja los más añejos para luego.
- En ese mismo orden debes servir primero los vinos de menos cuerpo (menos sabor por decirlo de una forma mas coloquial) y deja los más intensos para el final (los podrás diferenciar por la cantidad de tanino o por sus colores mas intensos y menos traslucidos)
- Y lógicamente primero sorprende a tus comensales con vinos secos y vas llevándoles a los más dulces.

Al igual que tu cena va agarrando fuerza y sabor, tu selección de vinos debe ir acompañando este IN CRESCENDO de sabores. Por regla general se acompaña el pescado, los mariscos y algunas carnes blancas con vino blanco, el tinto a las carnes rojas y los dulces con el postre o como aperitivo.


Si quieres más información puedes consultar el siguiente web site:
  http://www.sabormediterraneo.com/vinos/temperatura_vino.htm


Mi experiencia es que puedes sorprenderte como algunos tintos jóvenes pueden realzar unos mariscos o carnes blancas. Para mi también debes escoger el vino con la forma de cocción o presentación de la comida que va a acompañar, para un pescado preparado muy delicadamente, vino blanco, semi-seco. Pero si es un pescado frito o con una salsa fuerte y picante veraz como un tinto joven o un rosado lo convierte en una maravillosa experiencia en el paladar. La mejor forma de saber es experimentar, así que antes de tener invitados preparate en la intimidad de tu familia esta aventura culinaria y después sorprende a tus amigos.

Este tema es muy extenso y seguramente tendré que volverlo a tocar más adelante pero es un comienzo, si aún no te has dejado cautivar por semejante néctar.


Aún recuerdo la vez que invité a mi primo Ricardo a una clase sobre cata de vinos organizada por Industrias Polar en Venezuela que comenzaban a hacer vinos propios de la tierra y presentaban su "Tempranillo".

Comenzó muy bien con el reconocimiento de esencias, porque lejos de lo que algunos creen, el buen vino como la buena comida o una bella dama se comienza a disfrutar en el olfato, ese sentido que nos deja percibir aquello que está y no se ve, como un cervatillo que huele en el ambiente la presencia de un tigre, igual nuestro cerebro se deja cautivar primero por el olor, las fragancias que nos llegan, el BUQUÉ dicho por un experto. Poder encontrar el olor a madera, a chocolate, a frutas, a canela, a orégano, a picante es un placer que debemos aprender a volver a tener.

Luego pasamos al disfrute y reconocimiento del color, a sus matices, a esos brillos en la copa, esos colores tan rojos y vivos como la sangre y tan brillantes como el oro, el trigo, evocadores a los labios de una jovén mujer, deseosos y seductores.

Y claro teníamos que llegar al climax de una degustación, de una cata. Dejarnos seducir por esos sabores en boca, los taninos, las especies, la dulzura y la madurez, ese redondo en paladar que te deja abierto todos los sentidos y que poco a poco te va dejando también al descubiertos los sentimientos y la alegría de niños siempre oculta por las reglas de la sociedad.

Para hacer más increible esta subida al mismo Olimpo cada vino fue acompañado por una tapa, un entremes, un canape, uno más increible que el anterior. La idea era poder apreciar como un buen vino, bien escogido, era una acompañante especial para cada tipo de comida, como la realzaba y ensalzaba hasta lo más alto de nuestro gusto.

Una prueba final serían las temperaturas ideales para cada tipo de vino, tan frio como para perder el sabor o tan caliente para ser hasta repulsivo...había que conocer exactamente la temperatura de cada selección, justo donde todas sus propiedades y magistrales matices se coronaban y nos deleitaban en todo su esplendor. Y rematamos con una degustación de espumosos champanizados, brut, cavas, burbujas locas que acompañan al exito (o asi nos lo vende la publicidad y el cine).

Hasta aquí todo suena muy poetico, romantico y hasta dan ganas de servirse un vino ya mismo. El detalle es que nadie nos dijo que NO DEBIAMOS TOMARNOS TODAS Y CADA UNA DE LAS COPAS QUE NOS SIRVIERON. Nadie se tomo un segundo en decirnos que solo llevaramos al paladar y luego escupiéramos el buche de vino que habíamos "catado" porque podríamos terminar más borrachos que una cuba. Así que se podrán imaginar al final del recorrido quienes estaban ligando (hechandole los perros) con las promotoras de Polar y cantaban rancheras!.

Un consejo para concluir: cada vez que te inviten a comer a una casa, con unos amigos o simplemente una reunión haz lo que pregona el BRINDIS y lleva una buena botella de vino, para que puedas levantar tu copa con orgullo y decir "ESTE TE LO TRAJE YO".
" Los Hombres son como los vinos: la edad agria a los malos y mejora los buenos" 
                                                                                                                          Marco Tulio CICERÓN

sábado, 21 de enero de 2012

Con una PISCA de SABOR


Estoy casado con una australiana-española y le encanta la buena comida, nuestra luna de miel fue en Venezuela y evidentemente (como diría un venezolano) teníamos que ir a Mérida, nuestra tierra fría, final de la impresionante cordillera andina con sus 5 picos de nieves eternas, pero sobre todo de una gente maravillosa y encantadora y una gastronomía excepcional. Allí ella se sorprendió que yo me desayunara con ese típico plato merideño a base de su sopa más característica: LA PISCA ANDINA. Ella quedó encantada con esta joya de nuestra comida, tanto que de vez en cuando me pide prepararsela para el almuerzo o la cena, como plato único por su gran fuente de proteínas y su completo valor nutritivo.
Justo ayer cenamos, a solicitud de ella, este manjar de dioses. Hoy les dejo aquí mi receta especial de esta sopa, (los que me conocen saben que he sido y soy muy receloso y egoísta con mis recetas, pero después que te haces viejo dejas esas tonterías para los jóvenes) para que tomen la cocina por asalto y disfruten sorprendiendo a sus comensales una tarde de invierno, que con el frío estas sopas bien cargadas de sabor siempre son bien recibidas y más si calientan el cuerpo y alegran al espíritu.
Primero que nada para los que no lo sepan, la PISCA como el CHUPE son típicas sopas de los países andinos a base de leche, huevo y papa (o PATATA como se dice por estos lados desde que en tiempos de la colonia y gracias a España, Europa toda se rindiera a los pies de este tubérculo americano y de su prima hermana la BATATA, que muchas veces compartían el mismo estanco de venta y de allí esa fusión de nombre PAPA+BATATA=PATATA). Dándole a esta comida una especial y suave textura al paladar, ese dulzor que nos encanta en platos típicamente salados y una carga energética única.
En un principio es una sopa muy sencilla de preparar y ligera de digerir, con base de un buen caldo de pollo (preferiblemente) o carne (en el caso de la PISCA NEGRA) aderezada con un sofrito de cebollín  (cebollino) y ajoporro (puerro), rematada con cilantro, leche muy caliente (casi a hervor) y un huevo crudo que se cocería dentro de ella antes de servirla. Servía para que los campesinos andinos entraran en calor mientras el Sol calentaba el ambiente antes de la faena. Eso si, acompañada siempre de una deliciosa arepa andina y mantequilla o nata (crema agria) que le terminaba de aportar el valor alimenticio de una comida completa. Algunas familias acostumbraban a colocar una mazorca troceada e incluso queso ahumado que la hace aún más deliciosa.
En esta receta que les propongo es mi versión gourmet de este plato exquisito, intentando ofrecer a los comensales una delicadeza y cremosidad en paladar, sin perder la esencia de esta comida y presentada de una forma elegante y soberbia. Consiguiendo así un primer plato sorprendente o un único plato fabuloso de compartir. Las medidas suelen ser referencias, cada cocinero debe y tiene que dar su toque especial en cada comida que prepare. Yo soy partidario que en casa se use los productos que nos simplifiquen la vida, así que no duden en usar cubitos concentrados de caldos, especies deshidratadas, productos congelados. Al final el amor con que se prepare se notará en personas sonrientes sin querer levantarse de la mesa conversando de la comida y en los platos vacíos.
Los ingredientes para 6 personas son:
1 Kilo Papas
1 Pollo
2 latas Maíz tierno desgranado
1y1/2 Lts. Leche
1 lata Nata
1 Cebolla grande
3 Cebollínes grandes
1/2 Pimentón Verde (Pimiento)
1 Ajoporro (Puerro)
1 rama o penca de Celery (Apio) 
2 cucharadas Aceite de Oliva
Pimienta Blanca
Papikra
Sal
Cilantro
Eneldo
2 Huevo de Gallina
3 Huevos de Codorniz por invitado
- En Litro y medio de Agua ponemos el pollo a hervir para sacar su sabor, agregamos 3 cubitos de caldo de pollo para hacer la base de nuestra sopa. Unos 30 minutos.
- Mientras cortemos muy fino la cebolla, el cebollín (todo incluyendo la parte verde), el pimentón, el celery y el ajoporro. Con el aceite de oliva haremos el sofrito a fuego medio, hasta cristalizar la cebolla.
- Sacamos el pollo y desmenuzamos su carne en trozos medianos (suficientemente grandes para un bocado), la reservamos.
- Dentro del caldo agregamos la papa cortada en cubitos y el sofrito, hasta que la papa ablande.
- Entonces agregamos el pollo y los huevos de gallina que rompemos vigorosamente dentro del caldo hirviendo (yo suelo usar el batidor para esto, moviendolo vigorosamente de lado a lado) . Debemos conseguir que queden hilos de huevo suspendidos en el liquido. 
- Adicionamos el maíz y la leche que debemos calentar antes. Mantenemos a fuego medio la sopa mientras salpimentamos al gusto, damos unos toques de papikra (y dependiendo de los gustos se le puede añadir un toque picante con pimentón picante en polvo), el cilantro y dejamos mezclar los sabores por unos 20 minutos más. Importante es que aunque debe estar muy caliente, no rompa en hervor fuerte la leche.
- Agregamos la nata liquida, corregimos la sal y pimienta. Y dejamos unos 10 minutos más. Mientras vamos abriendo los huevos de codorniz en un bol.
- Apagamos y dentro de la sopa vamos agregando con una cuchara cada uno de los huevos de codorniz por separado (si lo prefieres puedes ir abriendo los huevos y echándolos a la sopa directamente) para que se cocinen dentro de la sopa y de forma de poder servir a cada comensal en su plato los tres huevitos hechos.
- Servimos bien caliente, buscando que siempre queden los huevitos de codorniz flotando, espolvoreamos con eneldo y acompañamos con una arepas andinas o pan tostado con mantequilla y ajo. Un vino blanco semi dulce y un jazz de fondo (o la canción "Soy de los Andes...soy puro corazón..." si eres muy patriótico) y a disfrutar. 
Recuerda, la comida tiene tres formas de ser disfrutada: por su apariencia y presentación, por su sabor y olor y por las personas que te acompañen en la mesa. Espero que te atrevas a prepararla y me cuentes que te pareció. ;) 

jueves, 19 de enero de 2012

Ser o no ser GOURMET? That's the cuestion!



Buscando en Wikipedía encontré una definición de Gourmet (palabra francesa que identifica a la persona altamente conocedora de comidas y vinos) que me pareció adaptarse al concepto de negocio que nos habiamos planteado:
"Un gourmet o gurmé es una persona con gusto delicado y exquisito paladar, conocedor de los platos de cocina significativamente refinados, que tiene la capacidad de ser catador de talentos de gastronomía al probar el nivel de sabor, fineza y calidad de ciertos alimentos y vinos.
Parámetros: Un catador de comida distingue en sus observaciones, si un plato es "delicatessen", es decir, si va de acuerdo con las exigencias que requieren las debidas preparaciones de los productos alimenticios de la más alta gastronomía. Existe una amplia variedad de comidas y bebidas gourmets: desde embutidos, jamones, quesos, caviares, pastas, carnes, aves, mariscos, salsas, mermeladas, panes, semillas, granos, chocolates, postres, vinos, licores, cafés y hasta helados.
A la hora de emplatar se puede considerar delicatessen desde las composiciones más sencillas hasta las más laboriosas como, por ejemplo, los adornos florales comestibles. Ser gourmet es, al mismo tiempo, poseer un cúmulo de experimentados conocimientos en la materia gastronómica, una filosofía (Gastrosofía); así como sostener un estilo de vida, ser gustoso por los mejores sabores, y por lo tanto selectivo. Suele suceder que quien adopta esta forma de percibir el mundo, su gusto no solamente se enfoca hacia la comida, sino que también se extiende por el buen vestir y la buena música.
Hay negocios que se inauguran con la intención de captar clientes que practiquen este peculiar modo de vida. Los hay desde bares hasta restaurantes, tanto nacionales como internacionales. Existe inclusive en la televisión por cable un canal exclusivo para temas de esta materia "El Gourmet"
De allí que el nombre de nuestro negocio compartiera la palabra GOURMET en su desplegado. Ese es el concepto de vida que llevamos en casa (aunque en el vestir no sea yo precisamente un gourmet). Desde la compra en un supermercado o una tienda hasta la preparación y presentación de los desayunos, almuerzos y cenas hemos sido definitivamente muy sibaritas. ¿Por qué pensar que debe haber una comida especial, mas adornada, mas sabrosa, mas trabajada solo para una ocasión especial; si deberíamos celebrar la vida cada día?. Es que ¿a caso no somos nosotros mismos tan especiales que nos merecemos sentarnos a la mesa como reyes y no esperar solo a tener invitados?.


Para los antiguos griegos y romanos la comida era uno de los placeres que más nos acercaba a los dioses; en casi todas las culturas se celebraban los triunfos o los acontecimientos importantes con una gran comida con todo lo mejor (bodas, victorias, coronaciones, etc), el resto del tiempo solo bastaba con alimentarse. En una época donde los congelados y enlatados brillaban por su ausencia, la preparación de un festín para festejar y alegrar a los cercanos era un lujo que pocos podían darse. Hoy por hoy, y gracias a la globalización (algo bueno tenía que tener) podemos con muy poco presupuesto y muchas ganas e imaginación tener nuestros propios festines en compañía de nuestras familias (y todos y cada uno de los días).


Uso la palabra imaginación porque como un compositor o un artista el Chef debe recrear en su mente el sabor, el aroma, las texturas, la presentación y hasta la emoción de cada plato que prepara antes de hacerlo. Conocer el sabor de cada producto por separado, el matiz de cada especie que usa y como esta influye en su comida y la hace especial (el dulzor de la hierbabuena o el buqué intenso del orégano en el paladar) las combinaciones en el gusto de las carnes y las guarniciones; en especial el uso de las frutas y el agridulce de la comida del Caribe con sus combinaciones magistrales con el coco, la piña, las uvas pasas, el mango, el plátano macho y las hojas de su árbol, etc. En Venezuela como en el resto de los países que compartimos el Mar Caribe (pero también la selva amazónica) nuestras comidas se nutren de la cultura de tres razas: la europea mediterránea, la africana y la autóctona aborigen, obligando a un mestizaje no solo genético sino también de sabores, formas y presentaciones culinarias increíbles.


Los invitamos a que dejen salir el artista que hay en cada uno de nosotros y se preparen a descubrir un mundo fantástico y único: el de la cocina creativa y sabrosa. Abrir la mente y el paladar a nuevos sabores y combinaciones y con ellos a la preparación de tus propios platos gourmet.  

martes, 17 de enero de 2012

La comida entra por la vista!





Comer para Recordar

Si hay algo que nos hace evocar épocas, sitios, momentos y hasta personas, eso es la comida. Pero no cualquier comida. Sino esa comida que hace que queramos volver, que nos sintamos como en casa o que nos hace ser feliz por un momento mientras nuestro cuerpo se nutre de esos alimentos y nuestra alma se alimenta de esos recuerdos. Pero también está la comida que crea esos recuerdos, que es compartida y disfrutada por pocos o muchos y que hace que ese encuentro sea memorable, como las comidas en casa de las abuelas, o en el parque con los amigos, la playa o esa ocasión romántica que nos compromete con la vida, las celebraciones y los reencuentros. 


Con esa filosofía creamos nuestra marca URBINS GOURMET, con la tradición de la gastronomía venezolana y caribeña, pero con la mezcla de la cocina mediterránea e internacional creando un concepto nuevo que aspira elevar (en un aspecto mas creativo) una nueva cocina evocadora. Queremos que muchas personas se den la oportunidad de descubrir y dejarse sorprender por estas recetas y productos concebidos artesanalmente, con la experiencia de las recetas de la familia y la vanguardia de una cocina creativa y moderna. 


Mi nombre es Armando Urbina Simanca, Chef de oficio y publicista/productor de profesión. Le debo a mi madre el amor a la cocina tradicional, al buen comer y al disfrutar de tener comensales a los que sorprender cada día. Aun recuerdo mi primer plato gourmet que prepare a los 8 o 9 años: "Pollo a las Uvas en salsa de Vino Blanco". Hasta el nombre me gustó cuando lo leí en aquella revista. Mi madre me enseño lo maravilloso que era cocinar para otros (y para ti mismo) y ver sus caras de felicidad, de gozo y la alegría que provoca una buena comida. Aunque no lo llegue a probar, el éxito que tuvo el plato con mi tía Silvia a la cabeza ese día fue rotundo. Así se abría para mi este mundo fantástico que es la comida gourmet.Luego me deje sorprender por sabores muy ajenos a mi y al país donde nací con la sibarita de mi tía Agnerys y los extraños platos que preparaba los fines de semana de entrañables juegos de cartas, aprendí a comer alcachofas,caviar y pare de contar. Cada  exquisitez me preparaba para descubrir un mundo tan infinito como el universo y tan universal como el pan.


Ahora que estoy lejos de mi entrañable país y de su gastronomía, sabiendo que son muchos los compatriotas que andan por estos lares y viendo lo poco que se conoce la riquísima comida venezolana, hemos decidido abrir esta pequeña empresa para que de una forma artesanal poder llevar a muchos hogares nuestros productos y servicios ... déjate sorprender y date la oportunidad de descubrir la cocina creativa o recuerda tu vida "Al norte del sur" con estos sabores:


Cachitos de Jamón - Pastelitos Andinos - Pan de Jamón Navideño - Hallacas - Quiché variados - Tartaleta de frutas - Tequeños de Queso - Cachapas de Jojoto tierno con Queso de Mano - Chupes de Camarones o Gallina - Pizca Andina - Chile de Caraotas (judías) rojas y carne - Reina Pepeada - Empanadas variadas - Mini Lunch - Golfeados mirandinos - Magdalenas y Muffin - Catering para reuniones de amigos o empresas - Chef en Casa.